En los últimos días, se conoció la noticia de la firma de un nuevo convenio entre la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP), a través de su rector, Alfredo Lazaretti, y el intendente loberense, Juan José Fioramonti, referido al dictado de cursos de capacitación laboral en el marco de la Escuela Universitaria de Formación Profesional de la universidad marplatense.
Los cursos en cuestión tienen que ver con oficios innovadores y están destinados a personas mayores de 18 años, con o sin formación secundaria.
Esta noticia me resultó sumamente interesante y me llevó a reflexionar sobre la importancia de los oficios y de capacitar a los vecinos en ellos a través de profesionales, permitiéndoles insertarse en el mercado laboral.
Es verdad que el mundo de hoy está cada vez más digital y tecnológico y con ello, las demandas en el mercado laboral han cambiado y evolucionado. De esta manera, muchas personas piensan que la única forma de tener éxito en el ámbito profesional es a través de un título universitario, pero eso es una visión limitada. La realidad es que los oficios técnicos también pueden brindar grandes oportunidades y ventajas a los estudiantes que deseen aprender una habilidad específica y práctica.
Contar con habilidades y conocimientos específicos, puede abrirnos la puerta a la generación de ingresos extras o bien ingresos principales.
De hecho, los oficios son muy valorados en el mercado laboral, tienen alta demanda y estabilidad laboral. Además, los estudiantes de oficios técnicos, en general suelen comenzar a trabajar en su carrera más rápido que los estudiantes universitarios.
Los oficios son muy demandados en sectores como la construcción, la plomería, la electricidad, la mecánica o la carpintería, entre otros. Es común que grandes compañías suelan contratar a emprendedores con mini empresas para que preste sus servicios.
Otra buena manera de ratificar la buena salida laboral que tienen los oficios es con el simple ejercicio de pensar cuántas veces nos contó encontrar un electricista, un albañil o un carpintero para alguna tarea en nuestro domicilio, en general porque tienen una alta demanda de trabajo que les impide tomar nuevas tareas.
Otro de los aspectos positivos de aprender un oficio, es que brinda la oportunidad de seguir aprendiendo y mejorando las habilidades a lo largo de la carrera, puesto que se requiere de una formación continua para mantenerse al día con las últimas tecnologías.
Esta opinión, bajo ningún punto de vista, implica menoscabar la importancia de una carrera universitaria, sólo pretende destacar que existen otras opciones igualmente válidas a la hora de pensar en un futuro laboral y que pueden resultar igualmente exitosas y gratificantes para quien las elige.
En conclusión, estudiar un oficio técnico puede brindar una gran cantidad de oportunidades y ventajas a los estudiantes que buscan aprender una habilidad específica y práctica. Desde oportunidades de empleo, hasta salarios competitivos y formación continua, los oficios pueden ser una excelente opción.
En Lobería, el Centro de Formación Profesional Nº 401 Jesús Obrero y el Centro Regional de Formación Laboral Nº 402 vienen brindando numerosos cursos de distintos oficios y ocupaciones desde hace muchos años y ahora se sumará esta nueva opción. Bienvenida sea.
Carlos Laboranti, director ejecutivo.
