Asalto en Arenas Verdes: Declaran los policías acusados

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Foto: Ecos Diarios

Hoy continuará el juicio contra los policías Martín Lencina y Verónica Gálvez, quienes están siendo juzgados por los asaltos ocurridos en Arenas Verdes en enero de 2020.

Martín Lencina se encuentra detenido desde la fecha en que ocurrieron los hechos en una cárcel del Servicio Penitenciario Bonaerense y tendrá la posibilidad de ofrecer su versión de los hechos, al igual que Verónica Gálvez, quien está acusada de “falso testimonio” y pidió declarar al igual que Lencina en la audiencia que reanudará el debate oral en la sala del Tribunal Criminal Nº 1.

La jueza Luciana Irigoyen Testa, presidenta del Tribunal y sus pares Mariana Giménez y Carlos Herrera, escucharán las versiones de los hechos de parte de los dos efectivos del Operativo Sol de seguridad, que vinieron a Necochea para reforzar la dotación de agentes policiales.

En la última jornada del juicio a los policías, también declaró Luciano Prigione, quien actuaba en enero de 2020 como investigador en la Sub-DDI de Lobería. El hombre fue uno de los testigos claves de los primeros indicios que se incorporaron a la causa judicial contra Lencina.

A Prigione le llamó la atención que Lencina, quien cumplía funciones en el Destacamento de Arenas Verdes, no se bajó del móvil cuando comenzó la pesquisa por los asaltos a las víctimas.

Según la referencia que hizo el efectivo policial en el juicio, Lencina viajaba agachado en el patrullero como tratando de ocultarse de algo y también habló de una charla que tuvieron Gálvez y Lencina, dónde la mujer le habría dicho a su compañero de trabajo: “Negro, a vos las alpargatas verdes te venden…”.

Y en ese momento, Lencina, le habría contestado que “encima, las víctimas dijeron que el arma era plateada como la mía…”, según lo declarado por Luciano Prigione.

Por otro lado, Matías Astudillo, también agente de la Sub-DDI de Lobería, llevó adelante un croquis en el Tribunal Criminal sobre cómo fue la tarea de campo que desarrolló en Arenas Verdes, una vez que se conocieron los dos asaltos a mano armada por parte de un grupo comando que les robó a las familias Archieri y Tanevich, quienes estaban además con familiares y amigos en las viviendas de veraneo.

A Astudillo le parecieron sospechosas algunas de las actitudes de Lencina y el proceder del hombre de la fuerza de seguridad que es juzgado en estos momentos.