Lo que dejó la fiesta de la lectura

133

Del lunes al viernes de la semana pasada se realizó la Fiesta de la Lectura en el Espacio Cultural, con la organización de la Dirección Municipal de Educación y Cultura junto a Jefatura Distrital y Consejo Escolar. Una vez finalizado el evento se evaluó lo ocurrido y el resultado es altamente positivo; el Espacio Cultural tuvo un movimiento impresionante, lo recorrieron instituciones educativas y familias, chicos y grandes; artistas, narradores y escritores de otras ciudades nos visitaron y se le dio también un lugar a lo local; durante cinco días la lectura estuvo de fiesta y ya surgieron algunas propuestas para la octava edición que tendrá lugar en 2018.
En distintos salones y en el patio del Espacio Cultural hubo propuestas para todas las edades: espacios de lectura, narraciones, presentaciones de libros, actividades y talleres, muestras y espectáculos, exposición y venta de libros. 


Un lugar destacado tuvo la muestra homenaje a María Elena Walsh, en el Salón de Exposiciones, que recibió la visita de niños, jóvenes y adultos. Ésta puede recorrerse hasta el 7 de noviembre. Los niños del jardín y los adolescentes del secundario escucharon narraciones de Verde Violeta y de Adriana Castro y Mónica Jurado. Y los adultos también escucharon fragmentos de novelas, micro relatos, poemas y poesías de escritores de Mar del Plata, y pudieron conversar con ellos: nos visitaron Carlos Cartolano, Claudia Morro y Nora Albalat. 


También hubo un espacio dedicado a la presentación del libro “De orugas a mariposas”, de la psicóloga necochense Sandra Altolaguirre y equipo conformado por profesionales de distintas disciplinas que le dan a dicho libro una trama y una estructura muy interesante y comprometida al abordar el tema sobre situaciones de violencia en niños y niñas. La narración sobre nuestra historia local también tuvo su lugar: los alumnos del taller de Narración Oral a cargo de Marcelo Musarra realizaron actividades con alumnos de secundaria, y Ana Delia Rodríguez leyó un cuento de su propia autoría que había recibido premio en un concurso. 


La literatura también se mezcló con las artes escénicas: los alumnos del taller de teatro de José Hugo Villarreal ofreció teatro leído; alumnas del taller de Actuación de Claudio García mostraron una escena, explicando cómo se trabaja en ese espacio desde la dramaturgia de actor y no desde un texto literario para ser representado; la profe de Laboratorio de Teatro Paula Soldavini hizo un taller de teatro de sombras para chicos, y Claribel Medina dictó un seminario de teatro para que aparezca el personaje, a partir de un libreto o guión y desde el trabajo del actor. Pero no fueron los únicos talleres, a éstos se sumaron el Grupo Papelnonos, con narraciones y construcciones de bombillas musicales; Luciano Mastronardi con su taller de música y murga, y Matías Agel con sus alumnos del Taller Digitalizarte, que invitaban a hacer arte multimedia a partir de cuentos clásicos. 


Y si de clásicos hablamos, no podemos dejar de mencionar el espectáculo que pusieron en escena las alumnas del Taller de Ritmos de Pamela Beltrán, quienes bailaron a partir de imágenes y situaciones de cuentos que todos conocemos, y tuvieron que hacer doble función porque se agotaron las entradas para la función prevista.
La Fiesta cerró con un espectáculo musical de tangos y boleros con Claribel Medina y Esteban Morgado, quienes tuvieron la generosidad de compartir escenario con artistas locales y profesores de la Dirección de Educación y Cultura: Nicolás Altieri (músico y profesor de guitarra criolla), Paz Giorgi y Federico Pérez Spinelli (profesores y bailarines de tango). El público se divirtió con anécdotas de Claribel y de Morgado, disfrutó de la música y aplaudió de pie. 


Para el año próximo se seguirá apostando a lo local, a la historia nuestra, a darle participación a los talleres de la Dirección de Educación y Cultura; se proyectó también realizar actividades pre-fiesta de la lectura, y ampliar los días y horarios para la venta de libros.