La suba del 96% del tipo cambio desde el inicio de marzo de 2018 hasta febrero \u00faltimo provoc\u00f3 una disminuci\u00f3n del 55% en el atesoramiento de divisas por parte del sector privado. Por el contrario, los \u00abInversores institucionales y otros\u00bb, tanto residentes como no residentes, efectuaron compras netas por alrededor de USD 600 millones, mostrando una reversi\u00f3n respecto a las ventas netas observadas en febrero de 2018 por USD 1.100 millones, producto del efecto contagio de la salida de capitales de los mercados emergentes, que siempre en el caso de la Argentina sobresale por su intensidad.<\/p>\n

<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n

De ah\u00ed que\u00a0el bimonetarismo se mantiene con singular intensidad, pese a la devaluaci\u00f3n del peso de casi el 50%,\u00a0que es otra forma de decir que ahora por la suba promedio del tipo de cambio\u00a0con los misma cantidad de pesos de un a\u00f1o atr\u00e1s ahora se compra la mitad de la divisa.<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n

Esa no parece haber sido la \u00fanica causa de la menor demanda de moneda extranjera por los cada vez menos argentinos que pueden comprar divisas con ingresos que se deterioraron en t\u00e9rminos en m\u00e1s de un 12%, sino tambi\u00e9n de las empresas que acusan disminuciones de las ventas de sus productos a ritmo de m\u00e1s de 10% en supermercados y shopping, y de hasta el 40% en bienes durables como automotores, motos y viviendas nuevas y usadas.<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n